Hoy os voy a contar como hacer una pizza un poco diferente. Lo primero es hacer la masa o comprar una ya hecha, si es fresca mejor, las congeladas… a mí no me gustan.
La última vez como tenía tiempo hice la masa: probé una receta
que encontré navegando por los blog de cocina cuando intentaba indexar este
blog en Google, algún día os lo cuento.(Mira
el enlace que lo explica mejor que yo, y viene con truco para fermentar la
masa.)
Mientras fermentaba la masa me acordé de que tenía que
llamar a Andrés.
--que pasa Andrés ¿Cómo te va?—le saludo por teléfono.
--Bueno, ya sabes, liado. Lo mi padre va muy lento y ya estamos todos cansados. –me dice con desanimo. Su padre
sufrió un accidente y ahora no se vale por sí mismo, además vive a una hora de
camino y tiene que ir dos veces por semana, además de uno de cada tres fines de
semana. –y lo peor es que mi madre no termina de admitirlo, casi es lo peor. Se
enfada porque dice, que mi padre no pone todo de su parte para volver a andar,
no sabemos que hacer…
--sigue contándome más desanimado si cabe. Además sé que ya
empiezan los rollos entre los hermanos… es difícil llevarlo.
Hablamos un rato y
para cuando me doy cuenta la masa ya ha doblado su tamaño. Ahora la estiro y
estiro... pensando en Andrés, ¡que duro!, cuando la impotencia te reconcome
noche y día, intentas buscar una solución, pero nada, parece como si todos debiéramos
saber gestionar todas las situaciones, y a lo mejor no estamos preparados o quizá no haya solución. Hasta que un día te
levantas pensando que ya has dado todo que podias y que aunque no has podido
con el problema, lo has intentado y es lo que cuenta, eso te reconforta un
poquito. A la larga te ayuda, lo que nunca superas es quedarte con la sensación
de no haber hecho le que debías.
Ya tengo la masa en un papel de horno y además necesito, jamón
serrano en taquitos, pimiento de piquillo en tiras salsa de tomate y huevos de
codorniz.
Unto la base con bien de salsa de tomate, dejando un par de
cm en el bode sin salsa, así podemos untar estos bordes en los huevos, Ñam,
Ñam… a continuación ponemos el jamón y
los pimientos.
Ponemos el horno con la bandeja dentro (para que se
caliente) a 240Cº cuando llegue a esa temperatura introducir la pizza en el
horno encima de la bandeja caliente, con esto conseguimos que la base de la
pizza quede dorada y crujiente. Una vez introducida la pizza bajamos la
temperatura a 200 Cº la dejamos 10
minutos y ya estará prácticamente hecha, ahora apagamos el horno y con cuidado
vamos echando los huevos de codorniz, alguno se nos romperá al abrirlo pero no
pasa nada. Dejamos 5 minutos dentro del horno apagado y listo.
La primera vez que hice esta pizza a mis hijas les encantó,
la menor de tres años tenía dos platos favoritos, la pizza y los huevos de
pajarito, como les llama ella, ahora este es lo más.
--corta los bordes y unta los huevos. —le digo a Elena, mi
pareja.
--ha, ¡pero si la yema no esta cuajada! – comenta
sorprendida.
--meto los huevos al final, cinco minutos con el horno apagado, para que se haga justo la
clara y la yema se pueda untar. —digo, orgulloso de mi invento y le cuento; como de
pequeños comíamos huevos al plato en unas cazuelitas metálicas y bla, bla, bla…sigo
hasta que veo esa preciosa sonrisa que significa: me gusta escucharte pero el
tema no me interesa demasiado, y termino mi historieta.